Suzuka2010: una entrada clasica.

Hoy (por ayer) Suzuka amanecio con el suave sonar de Edvard Grieg, una vez alejada la cortina de agua que impidio que se celebrara la sesion de calificacion de sabado y la culpable de que un servidor se levantara religiosamente a presenciarla en directo.

Pero todo sentimiento de paz y tranquilidad que me transmitio el sol naciente, se esfumo cuando vi que Alonso era incapaz de sacarle jugo a los neumaticos blandos y los Mclaren y un supersonico Kubica lo relegaban al quinto lugar. Lugar este, que no hacia sino agrandar mas la fisura abierta entre Montezemolo y Massa,¡tristemente eliminado en la Q2!. No se vosotros, pero yo creo que oi como alguien del publico alli presente, le dedicaba una acertada melodia, de Gabriel Fauré.

Y asi, transcurrieron unas pocas horas, hasta la carrera. He decir sobre la misma, que si no fuera por lo mucho que habia en juego en la pista, habria sido hasta tediosa. Vettel, Webber y Alonso, firmaron el podio sin exponer mas alla de lo necesario. sobre todo los dos primeros. Vettel sale reforzado en su autoestima y en sus opciones ultimas. Webber aumenta su ventaja y Alonso consigue un necesario podio, que puso en peligro un fulgurante inicio de Kubica y un desbocado Hamilton durante la carrera. Al polaco le miro el tuerto de la ruedas de Renault . Y el ingles, tras su parada obligatoria y al ritmo de Wagner, cabalgaba al galope tras el asturiano,hasta que la diosa fortuna manipulo su caja de cambios. Habria sido interesante ese duelo, pero otra vez sera.

Asi pues, salgo de Japon con la sensacion de que el mundial es cosa de tres. Mas que nada porque, a pesar del incansable trabajo de Button, este siempre rema a contracorriente. Por su parte a Lewis, parece que los finales de temporada se le hacen cuesta arriba. Por favor, que suene Lacrimosa de Mozart en el box de Mclaren.

No quiero despedir esta clasica entrada, sin hacer mencion al autentico protagonista de esta funcion. Kamui Kobayashi. Su irrupcion el año pasado como un soplo de aire fresco, nos impulso a pedir un monoplaza para el, para esta temporada, y no nos equivocamos. Kamui ha estado toda la temporada por encima de las posibilidades del Sauber y hoy, en Suzuka, en el gran premio de casa, lo ha dado todo, desde el semaforo verde hasta la bandera a cuadros. Alguersuari -en dos ocasiones-, Sutil, Barrichello y Heidfeld han sucumbido ante el depredador nipon. Bien merecido tiene que su compatriota Midori, le -y nos- ejecute un pieza de puro virtuosismo, y nada mejor que el Zapateado del pamplonica Pablo Sarate, nuestro mas ilustre violinista.




P.D.: a pesar de lo que parece a primera vista, musica clasica y F1 tienen mucho en comun, y no solo por los pedales que tienen los pianos. Cuando vemos una carrera, estamos escuchando una misma partitura ejecutada por diversos solistas, a los cuales les acompaña una orquesta que debera estar perfectamente dirigida para que la musica alcance la perfeccion. Eso si, no suena igual si tocas un violin normal, que un Stradivarius.

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